Este fin de año se lo dedicaremos a aquellos que son fieles reflejos de nuestro nacional trasandino Che Copete. En primer lugar, nuestra querida y peculiar derecha. Después de 15 años de nuestra también particular democracia, rechazan cualquier cambio al sistema binominal, incluso mediando las declaraciones anteriores de dirigentes del conglomerado derechista, como el candidato presidencial Sebastián Piñera.
El sistema binominal, por un lado, merma la democracia chilena, al ser un sistema excluyente de sectores relevantes de nuestra sociedad, marginándolos de cualquier discución a nivel nacional, lo que debería ser más democrático. Pero por el otro lado, y siendo lo que hace más impresionante el actuar de la derecha, es que le da a esta sobre representación en el congreso, llegando al límite en que se da un empate técnico. Es por eso que la derecha se merece este premio, por atraverse a seguir haciendo como si esto no fuera un punto relevante, a reclamar por la democracia, por la estabilidad y todo eso.
Sin embargo, siendo la UDI en ese sentido el partido más care raja, al menos es constante en su discurso. No lo cambia, ni en periodos electorales.
Por eso el Che Copete es tanto para Sebastián Piñera(por sus declaraciones "auspiciosas"), y para la bacanda de senadores RN, en este caso liderados por Baldo Prokurika, quienes presentaron un proyecto de ley para asegurar la representación de las minorías en la mesa del senado(ya que en este periodo por primera vez no tienen asegurada ingerencia en la formación de la mesa, por la eliminación de los designados), argumentando "la correcta representación de todos los sectores de la sociedad". Saque sus conclusiones.
La otra mención es para los señores de las Universidades Privadas, lideradas por el rector de la Universidad Mayor Ruben Covarrubias. Ya acostumbrados a sus declaraciones un tanto pretensiosas, esta vez afirmó(y alegó, pataleó y lloró) que era una injusticia que la Universidad de Chile usara anticipadamente los resultados de la PSU, invitando a comer a los puntajes nacionales.
Primero, considero súper injusto que Universidades como la Mayor cobren por los procesos de postulación cantidades a veces equivalentes e incluso superiores a lo que cuesta rendir la PSU, para poder postular, siendo que las postulaciones las toman en base a la misma PSU, por la cual los estudiantes ya pagaron. Además, es sumamente care palo de parte del rector Covarrubias(fiel representante del afán privatizador de los dictatoriales ochentas) exigir tales derechos, cuando ha sido él quien ha liderado la batalla contra proyectos tan básicos como el de acreditación universitaria porque "afectaría su autonomía". Bueno, si tanto le gusta su famosa autonomía, que no alegue.
Yo creo que hoy en día ya nadie discute la necesidad de las Universidades privadas, o del bien que le pueden hacer al país, pero tampoco nadie discute que el sistema actual es charcha, y está ad portas de lo que es una crisis.
Me gustaría que en Chile hubiera un sistema universitario único(atrás diferencias entre "tradicionales/privadas", que son muy arcaicas, y atrás instituciones precarias como el consejo de rectores), con un sistema de ingreso único también(la PSU por ejemplo), y un sistema de postulación ídem. Pero para eso se deberían dar las condiciones para este sistema: acreditación obligatoria y de calidad(y la institución que no se acredite, se cierra), y un sistema de financiamiento estudiantil único(fondo solidario estatal centralizado), para todos los miembros.
Pero mientras no se den esas condiciones, que no se han podido dar gracias a señores como el rector Covarrubias, nada de que vengan a freír monos(care raja!).
PD1. Finalemente no había querido dejar de trabajar, y sólo pedí cambio de supermercado, pero como vieron se decomisaron 1400 kilos de carne de un Unimarc de la Gran Avenida(sí, yo vi como le cambiaban las fechas a las carnes), y por eso todas las promociones de carne en los Unimarc fueron suspendidas. En verdad, no se si me paguen lo que trabaje siquiera!
